Américo Aguiar habla sobre su primer año de “adaptación”
El primer año en una nueva etapa de la vida siempre es un desafío. Ya sea que se trate de un nuevo trabajo, una nueva ciudad o, en el caso de Américo Aguiar, un nuevo país. El joven brasileño decidió dejar su país natal y mudarse a España para estudiar en una de las mejores universidades del país. Ahora, después de un año de “adaptación”, Américo nos cuenta su experiencia y cómo ha logrado superar los obstáculos y convertirlos en oportunidades.
“Cuando decidí mudarme a España, sabía que no sería fácil. Dejar atrás a mi familia, amigos y mi país fue una decisión difícil, pero sabía que era lo mejor para mi futuro”, comenta Américo. “El primer mes fue el más difícil. Todo era nuevo para mí, el idioma, la cultura, la comida. Me sentía fuera de lugar y extrañaba mi hogar. Pero decidí enfocarme en mi objetivo y no rendirme”.
Américo se dio cuenta de que la clave para adaptarse a un nuevo lugar es estar abierto a nuevas experiencias y aprender de ellas. “Comencé a tomar clases de español y a sumergirme en la cultura española. Me hice amigo de otros estudiantes internacionales y también de españoles. Aprendí a cocinar platos típicos españoles y a bailar salsa. Me di cuenta de que cada día aprendía algo nuevo y eso me motivaba a seguir adelante”.
Pero no todo fue fácil para Américo. Además de la barrera del idioma, también tuvo que enfrentar el desafío de adaptarse al sistema educativo español. “En Brasil, el sistema educativo es muy diferente al de España. Tuve que acostumbrarme a un nuevo método de estudio y a un nivel de exigencia más alto. Pero gracias a la ayuda de mis profesores y compañeros de clase, logré adaptarme y obtener buenas calificaciones”.
Otro aspecto que Américo tuvo que enfrentar fue la nostalgia. “Extrañaba mucho a mi familia y amigos. Pero gracias a la tecnología, pude mantenerme en contacto con ellos y eso me ayudó a sentirme más cerca de casa. También me di cuenta de que la distancia me hizo valorar aún más a las personas que amo y me motivó a esforzarme más en mis estudios para poder regresar a Brasil con una mejor formación”.
Después de un año de “adaptación”, Américo ha logrado superar todos los obstáculos y ha encontrado su lugar en España. “Ahora me siento como en casa. He creado una nueva familia aquí y he aprendido a amar esta cultura. También he descubierto nuevas pasiones, como el fútbol y la paella. Estoy agradecido por esta oportunidad de crecer y aprender en un país tan hermoso”.
Américo también tiene algunos consejos para aquellos que están a punto de comenzar una nueva etapa en sus vidas. “Lo más importante es tener una mente abierta y estar dispuesto a aprender y adaptarse. No tengas miedo de cometer errores, es parte del proceso. También es importante rodearse de personas positivas y motivadoras que te ayuden a superar los momentos difíciles. Y sobre todo, nunca pierdas de vista tu objetivo y trabaja duro para alcanzarlo”.
En resumen, el primer año de “adaptación” de Américo ha sido una experiencia enriquecedora y llena de aprendizajes. Ha demostrado que con determinación, perseverancia y una actitud positiva, se pueden superar cualquier obstáculo y convertirlo en una oportunidad de crecimiento. Ahora, está listo para enfrentar nuevos desafíos y seguir creciendo en su camino hacia el éxito.